Parece que se critica a los millennials por todo: demasiado liberales sexualmente, no tienen suficientes relaciones sexuales, tienen la actitud de merecérselo todo, no son suficientemente trabajadores, etc. Una de las quejas más extrañas es que no están dispuestos a comprometerse y optar por relaciones largas como sí hacían las generaciones anteriores.
La autora Elizabeth Landau ha investigado los datos disponibles y ha descubierto que hay parte de verdad en esta asunción tan particular. Si los comparamos con las generaciones anteriores, los millennials son personas con menor probabilidad de casarse durante su veintena. En 2014, solo el 36 % de las personas entre 18 y 29 años estaban casadas o vivían con sus parejas. Cuando Landau explica las razones de esta aversión, descubrimos que todo es un poco más complicado de lo que creíamos.
Uno de los problemas más importantes de los millennials es la sobrecarga de opciones para elegir. Esto significa que muchos millennials siente que simplemente hay demasiada gente en el mundo como para comprometerse con una persona. La abundancia de sitios de citas y apps para smartphones, nos da la sensación de que tenemos mucho más entre lo que elegir. Además de la gran cantidad de opciones, los millennials practican el llamado “amor lento”, que no es lo que parece. En vez de tomarse su tiempo para enamorarse de alguien, prueban a conocer y salir con varias personas. ¿Por qué? Porque quieren creer que están eligiendo a la mejor persona posible para una relación a largo plazo.
Otro contraste interesante entre la generación más joven y sus padres o abuelos es el hecho de que hay más millennials viviendo en casa con sus padres y durante mucho más tiempo. Esto significa que las personas jóvenes tienen muchos más problemas para cuidar sus relaciones y convertirlas en algo duradero. Simplemente piensa lo mucho que corta el rollo llevar a una chica a tu casa y que esta sea la casa de tus padres. Desde luego no es lo ideal, especialmente cuando los padres tienen a gala la regla de no hay sexo en mi casa. Esto nos lleva a otra razón importante, porque los millennials tienden a tener una visión mucho más relajada sobre el sexo antes del matrimonio.
Lo que significa que no necesitan estar casados para tener relaciones sexuales…por lo que el matrimonio no sale en la conversación cuando se habla de estas cosas.
Dicho todo esto, no queremos decir que los millennials no se vayan a comprometer nunca. De hecho, los millennials tienen su propia forma de ver las cosas respecto a enamorarse y comprometerse.
Algunos dirán que el modo de los millennials puede ser mejor. De acuerdo a una encuesta, los millennials que se han casado y conocieron a sus parejas online tienden a ser más felices y tienen menos probabilidades de divorciarse.
Pero si eres un millennial, esto no quiere decir que tengas que esperarte a casarte si no quieres.
Si tienes una relación que va encaminada de forma natural en esa dirección, ¡fantástico! La gente debería seguir a su corazón y dejar que sus relaciones fluyan hacia donde quiera que les lleven.