Cuando te enteras que una amiga va a casarse, puede que te pasen por la cabeza un montón de sentimientos opuestos. Aquí hablamos de las 10 cosas más comunes que una piensa en estas situaciones.
1. Cuando una amiga te anuncia que va a casarse con ese tío del que te habla llorando de forma regular, al menos una vez al mes, para contarte algo que le ha hecho con la única intención de hacerle daño: Todos hemos tenido una amiga que parece estar en una mala relación. Suelen venir a llorar a tu hombro más de una vez para quejarse de algo que ha hecho su pareja y, a pesar de todo, ¿van a casarse? Piensas para ti misma que ese matrimonio no va a durar demasiado y que empezarás a oír todos los problemas del matrimonio. Es un círculo vicioso que ahora estará sellado por un contrato.
2. Cuando estás disfrutando de estar soltera: Aquí estás tú, más feliz que una perdiz por estar soltera y pasándotelo mejor que nunca. Puedes ir y venir como te plazca, salir con toda la gente que quieres, seguir disfrutando lo que te gusta hacer… sin embargo, cuando tu amiga te anuncia que se va a casar, le das todas las felicitaciones posibles, le deseas lo mejor y das gracias a Dios porque no eres tú.
3. Cuando has estado esperando casarte tú durante toda la vida y ellos en comparación se acaban de conocer: Has estado con tu novio durante años y todavía no tienes un anillo en el dedo, a pesar de que tenéis una relación buena y feliz. Así que cuando oyes que tu amiga se ha comprometido tras haber salido con su nuevo novio durante solo dos meses, por supuesto, te sentirás frustrada. La pregunta es, ¿quién te frustra más? ¿Él no pidiéndote matrimonio o tu amiga precipitándose?
4. Cuando crees que todo el mundo se merece un final feliz: No todo el mundo espera que cualquier relación acabe como el rosario de la aurora y tú eres una de ellos. Eres ese tipo de persona feliz que siente que todo el mundo se merece un final feliz, así que ¿por qué no iba a tenerlo tu amiga? Estas eufórica porque una de tus mejores y más cercanas amigas vaya a ser feliz y comer perdices para siempre y esto simplemente renueva tu fe en el amor y en que algún día será tu turno.
5. Ya que eres soltera, sabes que no vas a recibir una invitación con “y acompañante”: Las bodas generalmente están pensadas para parejas casadas y la mayoría de la gente recibe invitaciones para sí y sus parejas. Sin embargo, tú eres soltera, así que probablemente no puedas llevar a un invitado. Así que a menos que te lleves bien con la familia o te muevas en el mismo círculo de amigos de los novios, lo mejor que puedes esperar es que al lado en la mesa te toque otro soltero divertido y no una mesa aleatoria con la abuela y ese tío de la novia tan raro.
6. No entiendes porque insisten en utilizar #tantoshashtags en cualquier foto relacionada con #compromisos: Por favor, ¿podemos dejar esto de una vez y olvidarnos de ello? Dejad de juntar palabras para formar hashtags ingeniosos que la resuman a ella, al novio, a la boda y a todo el proceso de planificación de la misma.
Instagram y Facebook no necesitan que se les llene de ridículos hashtags que no describen la fotografía en absoluto.
7. La mayoría de la gente que se está comprometiendo son buenos amigos o familia: De toda la gente que se compromete, muchos de ellos son familiares o amigos cercanos. Esto significa que probablemente tendrás que asistir a varias bodas, lo que significa un bombardeo de gastos, ayudar a hacer cosas DIY para la boda para cientos de invitados y comprar y llevar un vestido horrible que hace que tengas el aspecto de Frodo… Bien…
8. Si eres suficientemente afortunada como para tener amigas solteras que todavía no se van a casar: En el medio de toda esta charla sobre bodas, la gente asume que todas las mujeres solteras se esconden en una cueva para comenzar su colección de gatos. Pero no es el caso, porque hay muchas mujeres a las que les gusta salir con tus otras amigas solteras y hablar de un montón de cosas. Además, cuando sales con tus amigas solteras, puedes respirar un poco de aire fresco y hablar de algo diferente que no sean las futuras bodas.
9. Si estás ansiosa por que empiece el espectáculo del gran día: A todo el mundo le gusta un poco de drama, especialmente cuando alguien no entiende que las bodas son el día en que todo el mundo se fija en la pareja de novios y en nadie más. Todos conocemos a esa gente que odia no ser el centro de atención, así que si se les invita a una boda, es muy probable que monten una escena.
10. No importa cuál sea tú estado civil o estatus de relación, cada pocas semanas se anuncia una nueva boda en tus redes sociales: ¡Alerta roja, alerta roja! Eres una persona adulta y la gente a tu alrededor hace cosas de adultos. Agárrate fuerte porque esto de ser adulto va a ser una nueva y emocionante aventura.