Sin importar si habéis estado saliendo una semana, un mes o un año, es obvio que tu pareja no es capaz de dejar de ligar. Lo que tu consideras que es un comportamiento inapropiado, para él es un coqueteo inocente que no hace daño a nadie. Flirtear es algo subjetivo y cuando los dos miembros de la pareja no tienen la misma idea, puede acabar incluso en una separación.
Nuestra educación (clase social, aptitudes de los padres, cultura, religión) juega un importante papel en cómo vemos estas cosas. No hay duda de que a veces tenemos puntos de vista totalmente diferentes a los de nuestra pareja. Es importante que vayamos en el mismo barco.
Aquí te ofrecemos algunas maneras de hacer que tu pareja deje de coquetear sin control.
1. Habla de ello
¿Cómo va a saber tu pareja que te molesta que flirtee si no se lo dices? No es un lector de mentes. Puede que te sorprendas porque cuando se lo digas, te confiese que ni siquiera se daba cuenta de que estaba coqueteando.
Mucha gente coquetea por naturaleza. Cuando te sientas y hablas con él de sus coqueteos, le estás haciendo saber que estás cansada de ello y que si te quiere, debe dejar de hacerlo o, al menos, reducirlo a la mínima expresión.
2. El freno del ego
Si su flirteo constante te pone de los nervios, envía a una amiga a bajarle los humos. Dile a tu amiga que lo corte cuando empiece a coquetear y te mencione a ti, su pareja, en la conversación.
Esto hará que su aptitud cambie rápidamente y su ego se vendrá debajo de forma casi instantánea.
3. Conviértete en 007
Si estás verdaderamente preocupada de hasta dónde llegan sus coqueteos, especialmente en el apartado sexual,
puedes empezar a actuar y espiarlo un poco. Así verás lo dañinos o inocentes que son sus ligoteos. Pero ten en cuenta que si lo descubres engañándote gravemente, quizá tu relación esté dando sus últimos coletazos.
4. Haz lo mismo
Si no se da cuenta de lo mucho que te afectan sus coqueteos, dale un poco de su propia medicina. Cada vez que tu pareja flirtee, haz lo mismo. Imagina que está flirteando con la camarera en la cena, cuando vayáis a beber algo, coquetea tú con el camarero. Pero ten cuidado, esto puede poner en peligro tu relación y volverse en tu contra. Incluso puede que cortéis, sin que tu compañero siquiera se dé cuenta que por qué razón estabas flirteando con otros.
5. Anímale
Psicología inversa. Dales algunas sugerencias para mejorar su juego. En un mundo ideal, cuando animes a tu pareja a seguir flirteando, tendrá la sensación de que te estás distanciando de él. En consecuencia puede que reduzca sus coqueteos, para volver a centrarse en ti.