Una vez que has alcanzado ese punto en el que tu flirteo ha dado sus frutos y has conseguido su número de teléfono, puedes estar bastante seguro de que querrá saber de ti. Ahora el balón está en tu tejado
Entendemos que te puedes sentir un poco nervioso pensando en la posibilidad de llamarla y pedirla salir, pero si sigues estos pasos, estamos seguros de que serás capaz de pedirla salir sin que te rechace.
Primer paso.
Puede que estés mirando su número de teléfono tratando de controlar tus nervios para llamarla. Está bien, pero debes tratar de llamarla a una hora decente. Hasta que no sepas cuál es su horario y hasta qué hora acepta llamadas, debes jugar tus cartas de forma segura. En general, la gente prefiere que la llamen a mediodía los fines de semana o por la tarde los días de diario entre las 8 y las 6. Si no puede hablar contigo a esas horas, pide perdón por interrumpir y pregúntala que cuándo podrías llamarla otra vez.
Segundo paso.
Quizá esté disponible para hablar cuando la llames. En vez de tirarte a la piscina y pedirla una cita, deberías crear una rutina de pequeñas charlas. Puede que no sea tu estilo, pero os relajará a ambos y te dará una idea de las cosas que la interesan, algo que podría serte de utilidad más adelante.
Tercer paso.
¡Muestra tu sentido del humor! A las mujeres les encanta salir con un tío que las haga reír, así que si eres un comediante por naturaleza, este es tu momento para brillar. Por supuesto, si no eres tan gracioso, puedes ir por el camino seguro y recontar esa historia o chiste divertido que has oído hace unos días. Mantén el ambiente relajado y una conversación entretenida.
Cuarto paso.
Si la conversación va bien, puedes ir a por ello y preguntarla si querría continuar hablando tomando un café o incluso durante la comida. Seguramente prefieras continuar la charla en una cita corta, porque si la química en persona no es igual que a través del teléfono, no estaréis obligados a estar juntos más de lo necesario. Por supuesto, si la cita va bien y queréis ir a otro sitio después del café o la comida, es una opción que siempre tendréis abierta.
Pedir salir a alguien por teléfono no tiene por qué ser tan aterrador como algunas personas hacen que sea. Muy pronto descubrirás que teniendo un poco de práctica, hablando a las mujeres por teléfono es mucho más fácil saber cómo está yendo la conversación, si ella está interesada en salir contigo o no y si hay una conexión entre vosotros dos. Te recomendamos que esperes para pedirle la cita a haber tenido unas pocas conversaciones antes. Si ella sigue contestando tus llamadas, puedes estar seguro de que probablemente acepte tu invitación a una cita.